Cistus salviifolius
Género: Cistus
Especie: salviifolius
Familia: Cistáceas
Nombre popular: Jaguarzo morisco
Distribución natural: En toda la cuenca mediterránea. Es frecuente en la Península Ibérica (excepto en el norte y las zonas del interior) y las Baleares. Vive en matorrales, sotobosque de alcornoques, pinares, encinares, sobre suelos frescos, muy arcillosos o arenosos, descalcificados o en rocas silíceas.
Humedad: Baja
Insolación: sol
Requerimientos edáficos: Indiferente al sustrato (calizo o silíceo). Tiene preferencia por los suelos arenosos y tolera los que son relativamente salinos y también pobres en nutrientes y materia orgánica.
PH: Sin tendencia limitante
Color A: Blanco
Floración: Primavera
Porte: Arbustivo (mata) (altura: 50-70 cm; anchura: 50 cm)
Hojas: Persistentes
Resistencia al frío: Zona 7 (-17,7 a -12,3º C)
Características: Planta arbustiva o subarbustiva de follaje verde oscuro, con una floración blanca muy vistosa y abundante, muy contrastada con las hojas oscuras. Muchas veces crece sólo 30-40 cm y se comporta como tapizante. Es atractiva para los himenópteros. Tiene un crecimiento rápido.
Usos frecuentes: Muy útil para fijar taludes secos y degradados. En jardinería de bajo mantenimiento es apta para rocallas, agrupaciones de arbustivas y como tapizante, con una densidad de 3-4 plantas/m2. Puede vivir en lugares con influencia marítima.
Jardineria: Tolera las podas, pero no drásticas; las que se hacen a finales de la floración mantienen la planta más compacta y vigorosa. Requiere zonas con muy poco riego, sobretodo en las épocas de calor (ya que pueden aparecer con frecuencia problemas de Botrytis y de Mildiu), o bien estar implantada sobre terrenos bien drenados. Un exceso de riego o de fertilidad del suelo puede producir plantas sin consistencia, demasiado tiernas, pudiendo provocar, incluso, la muerte de la planta por asfixia radicular. Conviene evitar las plantaciones en pleno verano.
Agrupaciones:
Autóctonas.
Persistentes.
Perennifolias.
Adaptadas a zonas litorales.
Rocallas.